La organización de la Unidad de Helicópteros de Tráfico se articula en función de las misiones asignadas desde el comienzo de las operaciones:
- De tráfico. (Vuelos de vigilancia del tráfico, fotocontrol ….)
- De transporte. (Alerta sanitaria en rallies, concentraciones deportivas, evacuación de heridos …)
- De cooperación. (Con la Dirección General de Seguridad, de Obras Públicas, Agricultura …)(Con las distintas Direcciones Generales del Ministerio de Gobernación, Protección Civil) y con el Servicio Aéreo de Rescate.
Y en función de la clasificación de los servicios que se realizan:
- Normales. (Misiones de tráfico previstos y autorizados en el plan semanal … Vuelos de formación y entrenamiento ….)
- Extraordinarios. ( Misiones urgentes que no requieren de autorización previa)
- Especiales. (Misiones de cooperación que autoriza exclusivamente el Director General)
La organización administrativa de la Patrulla de Helicópteros exige una serie de trabajos que no pueden ser realizados por mecánicos o pilotos. En consecuencia, los Jefes Provinciales designan a un funcionario, el cual solicita del Jefe de la Patrulla los datos necesarios para la confección de los documentos como por ejemplo los planes semanales de vuelos, los partes semanales de vuelos, partes mensuales de actividades, de consumo de combustible, aceites, etc. La misión del Jefe Provincial es por tanto conseguir la máxima eficacia del empleo de los helicópteros que le sean asignados.
La misión del piloto es, entre otras supervisar los libros del helicóptero que tiene asignado y tomar las medidas necesarias para que esté al día en todo momento, efectuar la inspección prevuelo y comprobar personalmente que el aparato esté equipado para la misión a desarrollar.
Estas normas serían revisadas y ligeramente modificadas en febrero de 1975, destacando como más significativa una distinción clara de los helicópteros de turbina limitando el vuelo de entrenamiento de los pilotos a 30 minutos semanales.
Primer emblema de la Unidad de Helicópteros que se lucía en los monos de vuelo de los pilotos.
A partir de los setenta, los Jefes de Patrulla deben despachar directamente con el Jefe de Tráfico, que además sanciona las horas voladas por los mecánicos.
En los primeros años, los Cuerpos y Servicios que contaban con dotaciones aéreas no distinguían a las aeronaves excepto por su matrícula o código radio en caso militar. Actualmente todos los servicios se reconocen en el ámbito del control aéreo por su indicativo de llamada:
ÁNGEL. Policía Nacional.
CUCO. Guardia Civil
ARGOS. Vigilancia Aduanera.
PUMA, JASON, COTO, BARBO. Ejército del Aire. Etc, etc ……
Los helicópteros del Servicio de la Dirección General de Tráfico son ABEJA.
En este Servicio se atribuye un numeral que permanece adscrito a una aeronave para siempre. Antiguamente, el distintivo lo ostentaba el piloto, cuyo nombre en la DGT, en clave de radio, era «Níquel» (siendo el Jefe del Servicio «Níquel 0).
El indicativo de llamada y los símbolos asociados, fueron ideados por el ya Jefe del Servicio de Helicópteros Manuel Guillén.
Inmediatamente, los helicópteros son utilizados por los miembros de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil, por lo que se considera necesario establecer normas conjuntas que regulen la colaboración necesaria entre ambos (marzo, 1964).
Un extracto:
Se procurará comunicar las infracciones a los agentes en tierra para que efectúen la correspondiente denuncia; en su defecto se procurará tomar la hora, el Km aproximado, la matrícula y características del vehículo para formular las denuncias a su regreso a la base. Tomar tierra para formular alguna denuncia debe considerarse como un caso excepcional y no se llevará a cabo de no existir importantes razones que lo aconsejen.
Fuente: Manuel Guillén (Jefe Área de la D.G.T.) y José Mª Rubio (Ingeniero aeronáutico y Director de Relaciones Institucionales de Eurocopter España)